China promete más apertura económica en la macroferia de importaciones de Shanghái

06.11.2018

En plena guerra comercial con EE.UU., el presidente Xi Jinping inauguró este foro, al que asisten 3.600 empresas de 172 países

Hasta el próximo sábado se reúnen en Shangai 3.600 empresas de 172 países

Con promesas de más importaciones y más apertura económica, el presidente de China, Xi Jinping, ha inaugurado este lunes en Shanghái una macroferia comercial en la que participan 3.600 empresas de 172 países. En plena guerra comercial con Estados Unidos por los aranceles impuestos por el presidente Trump, la Exposición Internacional de Importaciones de China (CIIE, en sus siglas en inglés) persigue demostrar al mundo el aperturismo económico del gigante asiático y ampliar su percepción no solo como la -fábrica global-, sino también como el mayor mercado del planeta.

Apelando una vez más a su crecimiento económico de las cuatro últimas décadas y a sus 1.300 millones de habitantes, con los que sueñan las empresas de todo el mundo, Xi Jinping aseguró que "es nuestro sincero compromiso abrir el mercado de China", según informa el periódico -South China Morning Post-. Para ello, prometió bajar aranceles y ampliar la inversión extranjera en la salud y la educación. De igual modo, ha anunciado una mayor apertura en el sector financiero y en los servicios, así como la progresiva liberalización de la agricultura, la minería y las manufacturas.

Pero, como en ocasiones anteriores, evitó dar plazos y detalles. Para captar a los vendedores de otros países, tan solo predijo que, en los próximos 15 años, las importaciones chinas ascenderán a 30 billones de dólares (26,3 billones de euros), y a 10 billones de dólares (8,7 billones de euros) las de servicios. "China seguirá abogando por la apertura a nivel global y actuará como un motor estable para el crecimiento mundial", ha prometido en su discurso de inauguración.

Para demostrar la voluntad compradora de China, las empresas estatales acuden a esta feria con la orden de firmar acuerdos millonarios con el extranjero. Pero, según informa la agencia Reuters, muchos de dichos contratos forman parte de sus pedidos anuales, que se formalizan en noviembre. Es el caso de la petrolera CNPC y de la petroquímica ChemChina, que tienen previsto suscribir estos días sus encargos de crudo y gas a Saudi Aramco y Qatargas para mostrar su apoyo a esta gigantesca exposición.

En el ámbito político, a la feria asisten los presidentes y primeros ministros de 18 países. Desde Rusia hasta Cuba o Kenia, la mayoría son aliados de China y socios de sus -Nuevas Rutas de la Seda-, pero destaca la ausencia de mandatarios occidentales.

EE.UU. sin representación oficial

El caso más relevante es EE.UU., que no ha enviado a ningún alto representante al hallarse inmerso una virulenta guerra comercial con China que ha provocado la imposición mutua de aranceles multimillonarios. Aun así, están presentes 136 compañías estadounidenses, entre las que destacan Ford, General Electric, Dell y Google, que curiosamente está prohibida en este país por no someter su buscador de internet a la censura china.

Aunque algunas informaciones apuntan a que Xi Jinping se reunirá con Trump en la cumbre del G-20 en Argentina para poner fin a la guerra comercial, en ningún momento se refirió a él en su alocución. "Los países deben oponerse explícitamente al unilateralismo y al proteccionismo para que podamos construir una economía mundial abierta", volvió a insistir el presidente chino con el mismo discurso que lleva repitiendo desde que inauguró el año pasado el Foro de Davos. En clara oposición al proteccionismo que pregona Trump