En este precioso pueblo Holandés tienen 180 curiosos puentes y no existen los autos

28.12.2021

En los Países Bajos hay un pueblo digno de cuentos de hadas. Un lugar donde no hay calles, ni autos, sólo hay canales. Este pueblo se llama Giethoorn y está ubicado en la provincia de Overijssel, al noroeste de Holanda, a una distancia de 130 kilómetros de Ámsterdam.

En este pueblo de la provincia de Overijssel está prohibido tener autos, aquí se camina o se navega. La tierra y el agua conviven en este entorno. Así lo han establecido las autoridades para que su belleza siga floreciendo en esplendor.

Esta romántica localidad nació en el siglo XIII, cuando unos monjes del Mediterráneo se instalaron en estas tierras. Estos primeros habitantes encontraron en el lugar un montón de cuernos de cabras salvajes y decidieron nombrar su asentamiento como Geytenhorn (cuerno de cabra). Con el paso del tiempo se convirtió en Geythorn hasta convertirse actualmente en Giethoorn.

Pero el verdadero auge de Giethoorn tuvo lugar en los siglos XVI y XVII con la actividad económica de la extracción de la turba, un combustible orgánico muy utilizado en aquella época. Para facilitar el transporte de este material, se construyeron canales y la misma extracción creo decenas de lagos y charcos que conforman el paraje pantanoso sobre el que se asienta la población. Las casas quedaron separadas en pequeñas isletas, accesibles solo en barcas o a través de los puentes. Por eso mismo la llaman "La Venecia de los Países Bajos".

Antiguamente, los granjeros solían transportar sus vacas, bidones de leche y paja en un barco de madera plano, llamado "punter" en holandés. El nombre "punter" viene del palo que utilizaban para impulsar las barcas por las aguas poco profundas del canal. Los "punter" o barcos silenciosos tienen un motor que te permite disfrutar de un paseo panorámico sin ruido por el pueblo.

Pero esta bonita localidad también se puede descubrir a pie, cruzando sus 180 curiosos puentes de madera, disfrutando de un privilegiado paisaje de juncos, magnolias en flor y frondosos árboles y las preciosas casas tradicionales con techos de paja y cuidadosos jardines.

De canales a pistas de hielo

Asimismo, por su ubicación geográfica, las peculiares calles de Giethoorn se convierten en enormes pistas de hielo en invierno. Que no haya coches, de hecho, resulta incluso curioso en casos como estos, ya que dejan libre toda la vía para los amantes de los patines. Cada año, con las bajas temperaturas, familias y visitantes aprovechan para pasar las tardes sobre las aguas congeladas.

Este hermoso pueblo cuenta con tan sólo unos 2.600 habitantes. A pesar de ello, se ha convertido en un atractivo turístico. De hecho alcanzan la cifra de unos 150.000 a 200.000 cada año.

Giethoorn demuestra que no siempre es necesario renovarse y cambiar, simplemente basta con mantenerse fiel a la esencia. Mientras que el mundo se asfaltaba, se multiplicaban las autopistas y crecía la contaminación, en este pueblo holandés se apegaban a los barcos y canales que crearon sus ancestros

MIRA TODOS LOS TRÁILERS. Del exterior llega "Recuerdos mortales" con Russell Crowe, el film italiano "Siempre habrá un mañana", y "Back to Black", película biográfica de la cantante Amy Winehouse que repasa el vínculo con sus padres, la fama y su carrera musical. Las nacionales son "Alemania" y "Vladimir" con Daniel Aráoz, Carlos Belloso y Marcelo...