El primer ministro chino fija un crecimiento económico de entre el 6 y 6,5 por ciento
Li Keqiang inauguró la reunión anual de la Asamblea Nacional Popular

Li Keqiang inclinado durante la comparecencia
En plenas negociaciones con Estados Unidos para alcanzar un acuerdo que ponga fin a la guerra comercial abierta el pasado verano, el primer ministro chino, Li Keqiang, se ha fijado que la economía crezca este año entre el 6 y el 6,5 por ciento. Así lo ha anunciado ayer martes ante los casi 3.000 diputados congregados en el Gran Palacio del Pueblo de Pekín para la apertura de la reunión anual de la Asamblea Nacional Popular, el Parlamento orgánico del gobierno chino donde casi todos sus miembros pertenecen al Partido Comunista
"El país se enfrentará a una situación complicada este año y, mientras se toman las medidas para estabilizar la economía, China seguirá persiguiendo sus objetivos", prometió Li Keqiang en su discurso, emitido en directo por la televisión estatal. A pesar de las presiones del gobierno de Trump, Li lleva ya tres años augurando un crecimiento superior al 6 por ciento y el 6,5 por ciento. Con un Producto Interior Bruto (PIB) de 90 billones de yuanes (11,6 billones de euros), la economía china creció el año pasado un 6,6 por ciento, una décima más de lo previsto por Li Keqiang.
Con un desempleo urbano en torno al 5,5 por ciento y rural del 4,5 por ciento, la inflación se situará alrededor del 3 por ciento, vaticinó el "premier". En la lectura ante los diputados del Informe sobre el Trabajo del Gobierno, el discurso más importante del calendario político chino, Li Keqiang destacó los éxitos alcanzados en "tres batallas duras": los riesgos críticos para la economía, la reducción de la pobreza y la lucha contra la contaminación.
Para incentivar la economía, prometió recortar en 2 billones de yuanes (263.000 millones de euros) los impuestos a las empresas, así como rebajar las tasas al consumo y aumentar la inversión pública en infraestructuras. "Introduciremos beneficios generales y recortes estructurales de impuestos, sobre todo en el sector de las manufacturas y en los pequeños negocios", señaló Li. En concreto, el impuesto al valor añadido en las manufacturas y otras industrias pasará del 16 al 13 por ciento, mientras que el de los transportes y construcción se reducirá del 10 al 9 por ciento. "Dejaremos que las entidades del mercado, especialmente los pequeños negocios, sientan que se aligera el peso de sus cargas, cumpliendo nuestras promesas a las empresas y la sociedad", desgranó su agenda en pos de una mayor producción de la economía china.
Li Keqiang destacó las partidas en educación, sanidad, reducción de la pobreza y contaminación, "Los objetivos son ambiciosos pero realistas", valoró Li Keqiang, quien prometió "promover el desarrollo de alta calidad con el objetivo de completar la construcción de una sociedad moderadamente próspera en todos los sentidos".