El software que podría resucitar la voz de los top de la historia

MIRÁ EL VIDEO. Ingenieros de sonido de Barcelona aseguran son capaces de conseguir clonar cualquier voz.

Los ingenieros de sonido de Voctro Labs, empresa catalana nacida de la universidad Pompeu Fabra, que aseguran son capaces de conseguir clonar cualquier voz. Las de las leyendas musicales también... O, dicho de otra forma: con el software que han ideado sería posible escuchar a Michael Jackson interpretar nuevas canciones después de su muerte, pero también que lo hiciera en cualquier idioma gracias a su capacidad para realizar adaptaciones de los temas.

Voctro Labs han colaborado con Yamaha en Vocaloid, uno de los bancos de voz más avanzados del mundo, que proporciona al usuario la capacidad de sintetizar canciones introduciendo simplemente la letra y la melodía. Aunque muchas de las aplicaciones de Vocaloid se han desarrollado en el terreno del marketing y la publicidad, el software cuenta con un nutrido grupo de fans que no solo lo utilizan para escribir sus canciones, sino que también participaron en la creación del repertorio de una estrella del pop, "hasta fabricar un fenómeno de masas donde una cantante virtual llenaba estadios y la gente pagaba para ver un concierto de alguien que no existía", explica Jordi Janer, uno de los fundadores de la compañía. Y aunque el fenómeno que describe tiene que ver con la peculiar idiosincrasia japonesa, Janer reconoce que "recrear voz por ordenador ha sido siempre el sueño de muchos ingenieros en la historia".

Ahora ese sueño parece estar cerca de convertirse en realidad y ya no solo es posible crear estrellas pop virtuales, sino que sus aplicaciones son mucho más diversas en terrenos como la publicidad, la realidad virtual o los videojuegos. "Cada vez estamos más cerca de ese punto donde escuchar una voz sintética, una voz generada por ordenador, o escuchar una voz grabada sea indistinguible", asegura Janer, que ha visto la evolución de esta tecnología desde que en 2011 fundaron Voctro Labs. Pero, pesar de que las voces sintéticas alcancen una perfección absoluta y sean capaces de engañar a nuestros oídos, a uno le gustaría imaginarse a Michael Jackson mirando incrédulo a las máquinas y preguntándose cómo es posible que no afinen como él...