La clase media, al borde de un ataque inflacionario: se multiplicó por 10 el uso de apps para comparar precios

16.05.2019

Si bien en un principio se usaron para buscar productos premium, ahora se consultan para productos de la canasta básica. Prometen ahorros de hasta 40%

Empezaron siendo un recurso para ahorrar sólo en artículos premium. Pero lo cierto es que, con el paso del tiempo, las app que comparan precios han ido poblando los celulares de gran cantidad de argentinos que busca todo tipo de ahorros, más allá del producto o servicio que se trate.

La clase media analiza cada vez más las ventajas que le ofrece cada comercio y realiza un pormenorizado análisis de las promociones y rebajas de bancos y tarjetas.

"El consumidor argentino ahora pasó a ser multishopper. Es decir, combina entre cercanía, supermercados y mayoristas", asegura Luis Alfredo Rodríguez, de Kantar Worldpanel. Esta firma, especializada en consumo, realizó una investigación de la que se desprende que buena parte de la sociedad reparte su presupuesto mensual entre:

  • Supermercados e hipermercados: 42%
  • Autoservicios "exprés" o establecimientos chinos: 29%
  • Almacenes: 14%
  • Mayoristas: 9%
  • Otros: 6%

Más allá del canal elegido, lo cierto es que hoy pocos dejan de lado el día en que pueden lograr los mayores descuentos, qué promo le ofrece su banco o tarjeta y en qué establecimiento puede hacer rendir más su dinero.

Esta necesidad de hacer una "compra inteligente" es la que explica un dato contundente: las consultas en las app que comparan precios se multiplicaron nada menos que por 10.

GPS de ofertas

El sitio web Precios Claros, que exhibe los importes de 9.000 productos y 109 categorías informados por los supermercados.

Al ingresar el nombre de un artículo, el sistema permite visualizar los comercios más cercanos en los que se comercializa y su importe correspondiente. Además, posibilita el armado de una "lista de mandados" y expone las promociones especiales de cada establecimiento. Estos datos son ofrecidos a los desarrolladores para que creen sus propias app.

Una de las más consultadas (con más de un millón de visitas mensuales) es Comprando Precios Claros, que experimentó un alza del tráfico cercana al 1.000% en estos últimos meses.

La aplicación permite buscar los diferentes importes al escribir el nombre del artículo o escanear con la cámara del celular su código de barras, para saber si está barato o caro antes de sumarlo al changuito. También identifica el comercio de la zona en el que se consigue el menor precio.

"La lista de productos más buscados fue variando en base a la inflación. Antes, las personas se focalizaban en los más costosos. Pero ahora hemos observado un desplazamiento hacia artículos de la canasta básica, como la leche, fideos y queso cremoso", indica Matías Boyano, creador de la aplicación junto a Oscar Goenaga.

Añade que las personas logran ahorros de hasta el 40%. Como diferencial, la app no sólo releva la información de Precios Claros, sino que los usuarios pueden escanear productos y publicar los valores para avisarles a otros dónde conseguirlos. Una especie de "Waze" de recomendaciones.

"Los supermercados chinos también están. Si bien la app se alimenta de Precios Claros, la realidad es que fomentamos que la gente comparta ofertas, algo que es muy valorado en el interior", completa Boyano.

"En la app también aparece un 'chanchito', indicando que aplica una promoción para ese producto", remarca, y agrega que la plataforma muestra las condiciones para acceder a los descuentos, como tarjetas bancarias o programas de fidelización.

Además artículos individuales, permite comparar el costo de un changuito cargado con mercadería en diferentes locales. Según Furman, la aplicación "releva los 25 supermercados más cercanos a tu casa, que están a menos de 4 km, según la concentración de comercios de la zona".

"Algo innovador, y que no está en la app del Gobierno, es la posibilidad de armar un recorrido. La plataforma te va guiando para que adquieras tales artículos en un supermercado y tales otros en el minimercado más cercano", afirma

También permite el escaneo de los códigos de barras para ver si está más barato en otro lugar o si te respetan el precio publicado. De no cumplirse esto último, el usuario puede reclamar en el establecimiento y hasta posee un botón para denunciarlo en Defensa del Consumidor.

A futuro, apunta a que el usuario indique sus categorías favoritas en la pantalla principal de la app, en la que se muestran los productos destacados.

También electro

Si bien tomaron más protagonismo con el Hot Sale que se realiza esta semana, las aplicaciones para comparar importes de electrodomésticos, tecnología y artículos para el hogar también mostraron un fuerte crecimiento en lo que va del año.

Una de ellas es Historial, que ofrece un comparativo y un histórico de precios para que el usuario pueda chequear si el valor de un producto es razonable o puede estar más bajo.

"Las búsquedas se multiplicaron entre 9 y 10 veces", señala Ignacio de la Fuente, cofundador del sitio web, quien además asegura que lo más buscado son artículos de línea blanca.

La inflación es un gran desafío a la hora de actualizar la información de la plataforma, por lo que van adaptando las fechas desde la cual realizan la comparación de precios.

"Vemos que lo que hacen las tiendas es congelar el importe del producto mediante las promociones. Dan un 30% un día y 5% el otro para poder cambiar los valores sin que la gente se queje tanto", revela De La Fuente.

Otra de las opciones es MuyShopper, que compara tiendas online. Releva los comercios que venden un producto y resalta el que lo ofrece más barato. La app consigna los datos de un centenar de negocios, a los que ingresa entre dos y tres veces al día para verificar los importes.

Por su parte, los dueños del metabuscador turístico TurismoCity crearon ComparaCity, que se enfoca en los artículos para el hogar. Sólo hay que ingresar un artículo para dar con las mejores opciones de cada establecimiento. También se puede verificar si el producto aumentó al momento de la compra.

"Los usuarios no sólo quieren ahorrar: buscan precios porque no quieren pagar de más", remarca Julián Gurfinkel, uno de sus fundadores.

Con bolsillo diezmados, la clase media vislumbra en las app que comparan precios un camino para no perder tanto ante una inflación que sigue sin dar tregua.