La definición del TC hace explotar San Nicolás

07.12.2018

El Turismo Carretera tendrá este fin de semana un cierre que promete en el Autódromo de San Nicolás, donde por primera vez correrá la categoría. Hay 12 pilotos con chances por el título de TC. 

Los 12 primeros integrantes de la Copa de Oro. De ellos, solo Mazzacane y Trucco ya no tienen chances, mientras que Urcera y Nicolás Bonelli se incorporaron como dos de los "tres de último minuto".

El Turismo Carretera tendrá este fin de semana un cierre que promete en el Autódromo de San Nicolás, donde por primera vez correrá la categoría. La expectativa es grande porque 12 pilotos están con posibilidades matemáticas. Las cuatro marcas tienen sus firmes postulantes al título. Del puntero de la Copa de Oro al cuarto hay 15 unidades de diferencia y en la decimoquinta y última fecha estarán en disputa 70,5. El año pasado el título se definió en la vuelta final y por solo 0,25 puntos.

Será la definición más apretada que tiene la categoría desde que se emplea el sistema de Copa de Oro, variante de campeonato instaurada en 2008. Se trata de un mini torneo final donde se clasifican los 12 mejores de la temporada regular (fecha 1 a la 10). Las cuatro marcas tienen a fuertes postulantes en las primeras posiciones: Matías Rossi (Ford), Facundo Ardusso (Torino), Agustín Canapino (Chevrolet) y Jonatan Castellano (Dodge). Todos cuentan con al menos una victoria en el año, que es el requisito excluyente para coronarse. Además, el primero y el cuarto están separados por 15 unidades y en el circuito nicoleño habrá puntaje especial donde se agrega la mitad de los tantos a los de una fecha normal. Serán 70,5 puntos en total: 3 por hacer la pole positions (mejor tiempo en clasificación), 7,50 al ganar una de las tres series y 60 por vencer en la final. Los tres primeros tienen cierta ventaja pues ya conocen este trazado porque corrieron el 7 de octubre con el Súper TC 2000.

Rossi llega como líder a la definición..

El cuarteto principal de favoritos a la corona para saber cómo llegan. "Hace trece temporadas que estoy en muy buenos equipos y la confianza mutua es clave para pelear campeonatos. Que llegue adelante no me garantiza nada", manifestó Rossi (156 puntos), que irá por su segundo cetro, el primero con Ford. En 2014 fue campeón con Chevrolet.

Ardusso depende de sí mismo para coronarse.

"Rossi es el que está más fuerte porque viene clasificando muy bien. Si esto se repite, tendrá muchas chances. Igual yo me tengo mucha fe de que vamos a pelear y podemos ser campeones. Desde la última prueba que hicimos el auto mejoró mucho. Es una pista nueva y puede ser muy pareja para todos", indicó Ardusso (149), que viene de lograr el bicampeonato en el Súper TC 2000. En el TC ganó la última fecha corrida en San Juan y buscará devolverle la gloria a Torino luego de 47 años. El último cetro de la marca fue con el recordado Luis Rubén Di Palma, en 1971.

Canapino, la carta fuerte de Chevrolet.

"En un año muy difícil para Chevrolet ser el único piloto de la marca con chances concretas es una satisfacción. Rossi es el principal candidato y será muy difícil correrlo. Está complicado el tema, pero como siempre saldré a darlo todo para intentar pelear", aseguró el actual campeón Canapino (148), quien el año pasado alcanzó su segundo título luego de pasar a seis rivales en La Plata (un autódromo donde es difícil el sobrepaso) y asegurarse la corona en el último giro. Se consagró por apenas 0,25 puntos sobre Ardusso. Desde 2002 que un corredor no puede revalidar su corona, cuando Guillermo Ortelli obtuvo su cuarto campeonato, el tercero al hilo.

Castellano va por la gloria con la Dodge.

"Soy optimista. Tenemos un buen equilibro en el auto y este circuito puede ser favorable a las cuatro marcas. Sobre mis tres rivales directos, Rossi es rápido clasificando, pero se cae en carrera, caso contrario al de Ardusso y Canapino. Será para cualquiera", sostuvo Castellano (141), otro que quiere cortar la sequía de su marca: Dodge no sale campeón desde 2006, cuando se coronó Norberto Fontana. El Pinchito es hijo del tricampeón, Oscar Castellano, que se impuso en 1987, 1988 y 1989.

La lista de postulantes se completa con ocho pilotos. De ellos el mejor perfilado es Mariano Werner (Ford), quinto en el mini torneo final a 29,5 puntos del líder Rossi. Werner ganó este año al igual otros dos que sueñan con el título como Leonel Pernía (Torino) y Mauricio Lambiris (Ford). El resto de los que tienen alguna chance no vencieron en 2018 e irán a matar o morir si quieren ser campeón: Guillermo Ortelli (Chevrolet), José Manuel Urcera (Chevrolet), Nicolás Trosset (Dodge), Nicolás Bonelli (Ford) y Juan Pablo Gianini (Ford). En la búsqueda de la gloria Ford tiene a cinco pilotos, Chevrolet a tres y Torino y Dodge, dos cada uno.

Será la primera vez que el TC corra en el flamante escenario de San Nicolás, ubicado en el kilómetro 225 de la Ruta Nacional N° 9. La octogenaria categoría vuelve a la localidad del norte bonaerense después de 49 años. En su última visita, el 12 de octubre de 1969, se corrió en la ruta en un trazado de 15 kilómetros (los actuales rondan los 4 o 5 km), donde venció Carlos Pairetti con el Trueno Naranja (motor Chevrolet), prototipo con el que logró el título hace medio siglo.

En la inauguración del actual circuito nicoleño, hubo 30.000 personas en la carrera del Súper TC 2000. Este fin de semana se esperan 50.000 almas y por eso se agregaron tribunas tubulares que tendrán capacidad para 20.000 fierreros. Los precios de las entradas anticipadas son 800 pesos las generales y 1.400 el ingreso a los boxes; en el autódromo 950 y 1.600 (los valores contemplan el ingreso para los tres días de actividad). Se vivirá otra fiesta donde los hinchas de las cuatro marcas conviven sin problemas.

Todo está dado para que reviente el Autódromo de San Nicolás. El TC, la categoría más popular de la Argentina, entró en la recta final de esta temporada. Son 12 los pilotos que sueñan con la consagración. Las chances están abiertas para las cuatro marcas y se anuncia una definición apasionante.