Los radicales díscolos piden un acuerdo político para ordenar la transición
En un documento oficial del partido centenario, critican el rumbo económico y las últimas medidas, en un guiño hacia los gobernadores.

En medio de la turbulencia de los mercados por la incertidumbre respecto a la llegada del desembolso del FMI, la Unión Cívica Radical (UCR) elaboró un documento oficial donde pide expresamente un acuerdo político para ordenar la transición.
"El deterioro de la situación económica es tal, que hace necesaria una Convocatoria a un amplio Acuerdo Político, Económico y Social que permita garantizar un tránsito razonable hasta las elecciones de octubre y una transición ordenada hasta diciembre", sostienen.
En este sentido, deslizaron un guiño a los gobernadores peronistas al criticar "la reducción del IVA sobre algunos productos básicos" por ser "técnicamente muy cuestionable " y provocar "un conflicto con los gobernadores que ven afectados sus propios equilibrios fiscales".
El comunicado que lleva las firmas del presidente de la Convención Nacional de la UCR Jorge Sappia y del Coordinador de la Comisión de Economía Miguel Ponce -quienes hace tiempo cuestionan la gestión de Macri-, afirma que la mayor preocupación "no es la estrictamente técnica, sino la política" y se pregunta "quién renegociará el acuerdo con el FMI, ya que evidentemente el actual equipo económico no podrá por sí solo".
Las autoridades partidarias responsabilizan al gobierno de esta situación por no haber escuchado sus advertencias respecto a las "estimaciones infundadas de un rebote" económico y a "la ausencia de un verdadero Programa Económico". "El 12 de agosto mostró que la estabilidad del tipo de cambio era un espejismo. La crisis del día después desnudó la realidad", dijeron en un análisis que coincide con el del peronismo.
"Más allá de las expectativas de campaña de Marcos Peña que apuesta a 'revertir los resultados', todo indica que sigue el deterioro de la economía real", aspecto sobre el que agregan que "la sociedad ya se ha expedido al respecto, tal como queda evidenciado en los resultados de las PASO".
En virtud de ello, pronosticaron una inflación de entre el 5% y el 6% para agosto y de 6% a 7% en septiembre, y un aumento de la deuda por encima del 110% en relación al producto que compromete su sustentabilidad.
Bajo este escenario, plantearon que resulta imprescindible la llegada del desembolso del FMI para garantizar el cumplimiento de los pagos programados hasta fin de año, que totalizan unos 20.000 millones de dólares, aunque se mostraron optimistas en su aprobación por parte del directorio ejecutivo en Washington.