Messi le dio el triunfo a Argentina con un gol de penal

09.10.2020

La Selección derrotó 1-0 a Ecuador con un tanto de su capitán tras un controvertido penal que le pitaron a Estupiñac sobre Ocampos.

La Selección argentina se impuso anoche por 1 a 0 a Ecuador encuentro que se disputó en el estadio "La Bombonera", sin público por razones sanitarias, por la primera fecha de las Eliminatorias sudamericanas rumbo al Mundial de Qatar 2022.

El capitán Lionel Messi, máximo goleador de la historia de la Selección, anotó el único tanto del encuentro a los 12 minutos de juego, al convertir un penal que le cometieron a Lucas Ocampos, que con su potencia y velocidad fue uno de los mejores desde la banda derecha.

Argentina tuvo el dominio territorial y leve de la pelota durante la primera mitad, aunque sobre el cierre Ecuador inquietó con una pelota parada que casi se convierte en el empate.

En el complemento, Argentina encontró una situación muy clara cuando en un centro al área, luego de un lateral que parecía no generar inconvenientes para Ecuador, Lautaro Martínez se anticipó a todos de espaldas al arco y bajó el balón para Ocampos. El delantero quedó perfilado de manera perfecta para el remate a colocar, pero su disparo al segundo palo se abrió demasiado.

Pese a ese arranque, la Selección optó por replegarse. Abandonó por completo las sociedades que le habían dado juego en la primera mitad y le cedió el balón a Ecuador, aunque sin apostar al contragolpe. En cada recuperación, los volantes optaban por tocar el esférico hacia atrás o lateralmente sin buscar avanzar en el terreno. Fue así que Messi, Ocampos y Lautaro Martínez quedaron aislados arriba.

De esta manera, la Selección arrancó su camino a Qatar con un triunfo pero mostrando dos caras: una en el primer tiempo y otra en el segundo. Los más optimistas se quedarán con lo mostrado en la etapa inicial en donde se vieron las mejores sociedades y el equipo pudo dominar el balón, pero los más críticos optarán por centrarse en los ocurrido en el complemento, cuando el equipo de Scaloni prácticamente no atacó, se mostró errático y de no ser por la falta de creatividad ofensiva del rival, podría haber sufrido más de la cuenta.

El encuentro en el estadio "Alberto J. Armando" de Buenos Aires fue controlado por el árbitro chileno Roberto Tobar,