Schiaretti no se baja de la presidencia y complica a Patricia Bullrich
Los votos del gobernador de Córdoba eran el plan A de Bullrich para entrar al ballotage. La pelea con Macri que se agravó por el ataque a Seita.

En fuerte tensión con Mauricio Macri, Juan Schiaretti decidió sostener su candidatura presidencial rumbo a octubre y le pisa el territorio al socio fundador de Cambiemos y a su alfil, Patricia Bullrich.
Schiaretti, que en las elecciones del pasado domingo arañó el 4% nacional, pero quedó segundo en Córdoba (27,5%) detrás del libertario Javier Milei (33,6%), ratificó este lunes que continuará con su objetivo presidencial en octubre y esto se transformó en una noticia que incomoda a Bullrich y a la porción de Juntos por el Cambio que respaldará a la exministra de Seguridad en la General.
El schiarettismo sostuvo el objetivo amparado, no sólo a la espera de engordar los números de cara a los comicios presidenciales, sino también con la expectativa de alcanzar tres escaños en Diputados en diciembre. En la noche del domingo, el propio Carlos Gutiérrez, jefe del bloque schiarettista en la Cámara baja y primer candidato a diputado en el armado del PJ cordobés, ratificó: "tenemos la posibilidad de incluir dos diputados más y renovar mi banca".
El arribo de Gutiérrez al Congreso fue producto de la boleta corta que militó el schiarettismo en 2019 cuando el actual gobernador cordobés impulsó la prescindencia entre Alberto Fernández y Macri; aunque sus detractores dentro del PJ mediterráneo, como el exsenador Carlos Caserio, sostienen que por lo bajo militó la boleta de Juntos.
Sin embargo, la relación entre el expresidente y el cordobés atravesó fuertes cortocircuitos en el último tiempo. Entre varios motivos, su posible incorporación a la alianza de la mano de Horacio Rodríguez Larreta y el radical Gerardo Morales, el respaldo de Macri a Luis Juez y a Rodrigo de Loredo; y la última, la frase del líder del PRO el domingo por la mañana sobre el operador Guillermo Seita, a quien se refirió con una frase acunada por el juecismo duro "el paseador de perros", a la hora de hablar del asesor del cordobés, de Larreta y de Martín Lousteau, entre otros.
Schiaretti, desde la noche del domingo decidió sostener su candidatura, a pesar que la derrota de Larreta esmerila el deseo de gobierno de coalición que impulsa el propio gobernador cordobés desde hace meses.
Por tanto, la duda en Córdoba es quién hará su primer arribo a la provincia para tratar de pelear los votos de Schiaretti: si Bullrich o Sergio Massa. Y dónde irá esa utilidad electoral en octubre es la duda del arco político en Córdoba.
Info: Gabriel Silva