Schiaretti tendrá un minibloque y se planta con la "agenda federal" para negociar
El cordobés logró su objetivo de fortalecerse en el Congreso y ahora espera para negociar de cara al ballotage.

Juan Schiaretti cumplió con los objetivos que se impuso cuando decidió lanzarse a su aventura presidencial: logró conformar un mini bloque propio en el Congreso y, tras una cosecha de 7 puntos nacionales, se plantó con su "agenda federal", un anticipo de los puntos que deberá tener en cuenta Sergio Massa si quiere iniciar una negociación formal con el peronismo cordobés.
Aunque no pudo ganarle a Javier Milei en Córdoba (el libertario le sacó una ventaja de 100 mil votos), la desintegración de Juntos por el Cambio disimuló el segundo puesto de Schiaretti.
Con el resultado, el primer punto a favor del cordobés es su monobloque: desde diciembre tendrá cinco diputados nacionales y una senadora, clave para la negociación permanente en la que entrará el futuro Congreso.
En su discurso con tono victorioso, Schiaretti dijo que su "irrupción" en el escenario nacional significará la discusión de una "agenda federal" en un Congreso sin 'mayorías nítidas", un aviso que está abierta la negociación por la futura gobernabilidad.
Contará para ello con un bloque de leales en Diputados: su mano derecha, Carlos Gutiérrez; la mano derecha de Llaryora, Ignacio García Aresca; Natalia de la Sota, quién ya está cerca de Massa; Alejandra Torres, funcionaria de Llaryora y pareja del ministro de Finanzas cordobés, Osvaldo Giordano; y Juan Brugge, presidente del Partido Demócrata Cristiano, histórico socio del PJ cordobés. En el Senado está Alejandra Vigo, la esposa del gobernador, otra pieza clave del armado legislativo
Esta es la gran victoria de Schiaretti: puso en riesgo una banca y terminó la elección del domingo con tres, que se sumarán a las dos obtenidas en 2021. Será un minibloque vital para Llaryora y la negociación que tendrá el próximo gobernador cordobés con Massa o Milei. Esa discusión tiene un eje central: el financiamiento del Tesoro Nacional del déficit de la Caja de Jubilaciones de Córdoba.
El otro saldo positivo para Schiaretti fueron los casi 7 puntos nacionales, un porcentaje que parecía imposible la noche del 13 de agosto. Dos debates, una catarata de memes y la participación en medios porteños le dieron a Schiaretti una visualización que tuvo su correlación en las urnas, creen cerca del mandatario. La realidad de votos estuvo muy cerca de la expectativa previa, que eran 8 puntos nacionales.
En su discurso de la noche del domingo, el gobernador cordobés listó obras que considera prioritarias para el desarrollo del país y cabalgó sobre la necesidad de redistribuir los subsidios a las tarifas de servicios públicos, una forma de dejar asentado por dónde debe encarar la negociación con el PJ Córdoba Sergio Massa.
Aunque Schiaretti esquivó pronunciarse claramente a favor de Massa, como espera que lo haga la dirigencia del peronismo provincial, dio algunas pistas. Por ejemplo, dijo que "memoria, verdad y justicia es un patrimonio de todo el pueblo", en una clara diferenciación de Javier Milei y Victoria Villarruel.
La decisión final de cómo encarará el peronismo cordobés el balotaje será tomado por Schiaretti y Martín Llaryora en los próximos días. Es uno de los temas de la agenda que ambos mandatarios, entrante y saliente, abordarán durante el viaje que emprenderán a Emiratos Árabes, financistas de la red de acueductos que se construye en Córdoba.
Sin Juntos por el Cambio en el tablero, se especula que los jefes del PJ cordobés podrían dar señales favorables a Massa, siempre que éste concrete su promesa de construir un gobierno de unidad y mirada federal. El traslado, se sabe, no es lineal, pero en Córdoba Unión por la Patria llegó a los 14 puntos, casi una duplicación de la cosecha que había obtenido el oficialismo en las Paso.
Info: Juan Manuel González