Simon Pagenaud le da a Francia el triunfo en las 500 Millas de Indianápolis
Las 500 millas tuvieron un espectacular final en un sprint de 20 vueltas

El rostro de Simon Pagenaud será el próximo que se grabará en el trofeo Borg Warner como ganador de las 500 Millas de Indianápolis 2019, la 103ª edición, que tuvo un espectacular final al sprint de 13 vueltas. El francés dirimió un duelo a dos con Alex Rossi, los grandes dominadores de la prueba, que se decantó a su favor en la última vuelta. Pagenaud, campeón de Indycar en 2016, completa con un mes de ensueño con el triunfo en las 500 Millas (más que merecido ya que lideró 116 de las 200 vueltas).
El piloto de Penske se impuso en el Indycar GP, que también se disputa en Indianápolis (aunque en la configuración rutera), logró la pole y ahora se anota, por primera vez, el triunfo en la gran carrera. Si hacía cien años que un francés no lograba la pole, la última victoria gala data de 1914.
Watching @AlexanderRossi and @simonpagenaud go to battle was an absolute treat.
— NTT IndyCar Series (@IndyCar) 26 de mayo de 2019
And to think, just 6 days until we’re back on track at the @detroitgp 💯 #INDYCAR // #Indy500 pic.twitter.com/SU1PE0PfIC
La definición de la
103ª edición de las 500 Millas tuvo un desenlace poco habitual. Una montonera a
21 vueltas del final provocada por un choque entre Sebastián Bourdais y Graham
Rahal obligó a decretar una bandera roja que paró la prueba y deparó un
emocionante desenlace: al sprint y sin estrategias que pudieran generar un
ganador sorpresa.
Rossi y Pagenaud, que habían dominado la carrera desde el inicio, se turnaron en cabeza en esas intensas vueltas finales, con Sato como invitado inesperado (se rehízo de un déficit de hasta dos vueltas en la parte inicial). Rossi consiguió rehacerse de un fallo en boxes del equipo Andretti, que tuvo un problema con la manguera en la penúltima parada que parecía acabar con sus opciones.
Sin embargo, el americano llegó líder en la salida final e incluso lideró a falta de dos vueltas, pero la mayor potencia del motor Chevrolet permitió al francés, campeón de Indycar en 2016, recuperar el mando a falta de una vuelta, que mantendría hasta la bandera a cuadros. Sato, que no pudo en ningún momento inmiscuirse en la pelea entre Rossi y Pagenaud terminó tercero, por delante, eso sí, de Josef Newgarden -otra vez a las puertas del triunfo más prestigioso que le falta-, Will Power (que completó una sensacional actuación de los Penske) y Ed Carpenter, que de nuevo se quedó a las puertas del éxito en su ciudad natal.

La salida de la 103ª edición de las 500 Millas de Indianápolis. John Cote/Indycar
Como se esperaba,
Penske, Andretti y Carpenter fueron los coches dominadores de la carrera. Fuera
de ellos solo Sato y Scott Dixon pudieron hacerles sombra, pero la mala suerte
se cebó con el australiano, que se vio envuelto en el accidente decisivo: en el
caos rompió su alerón delantero y tuvo que hacer una parada nada más reanudarse
la carrera que le dejó sin opciones.